Isabel Mercadé es
profesora de lengua y literatura.
Escribe poesía y guion teatral.
Escribe poesía y guion teatral.
Su obra
Amapolas
en octubre. Cafècentral Poesia (2013)
Dónde
o sobre grutas y arena. Parnass Ediciones (2015)
Sus poemas y otros
escritos han sido incluidos en diversas antologías y revistas de literatura,
entre ellas la decana Alga o el libro
sobre la memoria histórica El hilo de la
memoria.
Colabora haciendo crítica
literaria en Quimera y otras
publicaciones como Shangri-la cine y
literatura o Espéculo de la UCM.
Es miembro del consejo de
redacción de la revista InterteXto de
la UFTM de Brasil. Como especialista en la obra de Clarice Lispector, ha
coordinado el número monográfico que Espéculo
dedicó a la autora en 2013, así como las jornadas que La Casa de la Paraula
le dedicó en 2015 con motivo del homenaje internacional “A hora de Clarice Lispector”
y ha impartido ponencias sobre la misma en diversas instituciones, entre ellas
la UPF y la UCM.
Es autora de la idea y el
guión del montaje teatral Va de dones,
que se representó en el SAT Teatre de Barcelona en el 2007, que recorre la
literatura escrita por mujeres desde Safo hasta la actualidad.
He aquí una muestra de su
poesía:
Prendimiento
solo
un gesto
una
mano en el umbral
y
la nuca
ligeramente
inclinada
la
luz del mediodía atenuándose
entre
las persianas
hilos
dorados que se doblan
en
un ángulo del cuarto
y
caen
sobre
la colcha blanca
silencio
de
hora dormida
en
la calle antes hiriente
y
su camisa azul
lejanamente
tibia
declinándose
bajo
una media sonrisa
fue solo un
gesto
Lanzabas
el cebo
lanzabas
el cebo
una
dos
tres
veces
recogías
pequeñas
piedras
brillantes
transparentes
algunas
todavía
vivas
tú
las mirabas
balancearse
alzándolas
entre
el pulgar y el índice
con
satisfacción
y
codicia
querías
más
tal
vez el núcleo
vísceras
o
una aleta plateada
pero
cuando
emergió
el pez
entero
dispuesto
boqueando
incluso
alegremente
lo
depositaste
con
cierta decepción
sobre
el asfalto
era
la hora
y
tú habías esperado
tanto
de
ese deporte
la
exigencia
o
algo así
como
la promesa
de
una falta
de
un deseo
de
duración
ilimitada
Y seguimos ampliando Recónditos que merece la pena leer.
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